La mañana del lunes sorprende con una noticia de carácter arancelario. En medio de las tensiones globales, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump está considerando librar a varios sectores de los aranceles para el 2 de abril.

¿Se trata de una nueva estrategia económica o de un nuevo giro en la política comercial de Trump?

Sin embargo, la administración de Estados Unidos, mantiene su postura de aplicar los respectivos aranceles recíprocos a países aliados y competidores.

Los aranceles recíprocos tratan de que el gobierno de Estados Unidos aplicará a un país, la misma tasa arancelaria que le sea aplicada.

Por ejemplo, si México decide aplicar un arancel del 20% a la importación de jarabe de maíz proveniente de EE.UU.; este puede tomar represalias igual con otro producto.

Sectores en la cuerda floja

Las industrias que destacan son aquellas dedicadas al sector automotriz, farmacéutico y el de semiconductores.

A pesar de que la imposición de aranceles se ha aplazado dos veces, aún no se tiene una visión clara de la situación.

Respuesta del peso

Sorprendentemente, las políticas comerciales de los recientes días, han impulsado al peso mexicano. El peso ganó valor frente al dólar después de días de pérdidas.

Se espera que tenga un impacto de la inflación, ya que datos revelan que, al mes de marzo, la inflación es menor a la que se esperaba.

2 de abril: el futuro incierto

El próximo 2 de abril, se determinará si el gobierno de Estados Unidos aplicará el 25% de arancel como se había establecido o si de podrá evitar al conocido “muro arancelario”, con el fin de no iniciar una guerra comercial.