Los puertos se están convirtiendo en centros interconectados de logística y comercio, integrando datos y colaborando con las partes interesadas en tiempo real.

La transformación digital en los puertos se apoya en una serie de tecnologías avanzadas que mejoran la eficiencia operativa, la sostenibilidad y la competitividad, avanzando en el concepto de puerto inteligente.

La tecnología IoT permite conectar sensores y dispositivos a lo largo del puerto para monitorear en tiempo real el estado de equipos, mercancías y entornos.

Los sensores IoT en contenedores permiten el rastreo de carga, la supervisión de condiciones ambientales y el estado de los equipos, lo cual reduce pérdidas y facilita una logística eficiente.

Estas tecnologías analizan grandes volúmenes de datos para hacer predicciones y optimizar procesos. La inteligencia artificial ayuda a mejorar la eficiencia operativa mediante la predicción de tiempos de arribo, el mantenimiento predictivo y la optimización de rutas logísticas, entre otras aplicaciones.

La capacidad de recopilar y analizar grandes cantidades de datos permite tomar decisiones basadas en información precisa y en tiempo real. La analítica de big data ayuda a gestionar operaciones de carga y descarga, tráfico marítimo, y procesos de seguridad y fomenta la mejora de la eficiencia energética y la reducción de los tiempos de espera.

La tecnología blockchain proporciona un registro inmutable de transacciones y operaciones, aumentando la transparencia y la seguridad en las cadenas de suministro, asegura la trazabilidad completa de las mercancías, mejora la confianza entre las partes y simplifica los procesos aduaneros mediante contratos inteligentes.

La automatización y los vehículos autónomos, como grúas y camiones sin conductor, permiten operar sin intervención humana en ciertas tareas. Al utilizarlos, los puertos pueden realizar tareas de carga y descarga de manera continua y segura, mejorando la eficiencia y reduciendo el tiempo de inactividad en operaciones clave.

Un gemelo digital es una réplica virtual de un activo físico que simula su comportamiento en tiempo real. Aplicados en la industria portuaria, facilitan la simulación de escenarios y la optimización de procesos sin necesidad de intervención física, lo que resulta especialmente útil para planificar el flujo de mercancías y prevenir posibles interrupciones operativas.

La conectividad 5G permite la transmisión de datos en tiempo real con mayor ancho de banda y menor latencia. La infraestructura 5G mejora la conectividad de dispositivos IoT y la operatividad de grúas, drones y vehículos autónomos. Disponer de una conectividad estable y rápida es fundamental para operaciones críticas y de alta precisión en los puertos.

Básicamente, esta tecnología consiste en almacenar, procesar y acceder a grandes volúmenes de datos desde cualquier lugar.  La computación en la nube facilita el acceso remoto a datos, fomenta la colaboración entre actores y permite una gestión más ágil y eficiente de los datos, mejorando la toma de decisiones.

La ciberseguridad abarca prácticas y tecnologías destinadas a proteger las infraestructuras digitales contra amenazas y ataques. Con el aumento de los sistemas conectados, los puertos son vulnerables a ataques cibernéticos. Las soluciones de ciberseguridad protegen las operaciones portuarias de riesgos que puedan comprometer tanto la integridad de la información como la seguridad física.

Los drones y robots realizan inspecciones de infraestructuras y áreas peligrosas o de difícil acceso en el puerto, así como tareas de vigilancia y monitoreo ambiental, como la medición de emisiones contaminantes. Los robots también ayudan en tareas de mantenimiento, aumentando la eficiencia y reduciendo los riesgos para el personal.